¿Qué es la Prostatitis?

Una prostatitis común puede convertirse en una enfermedad crónica.

La prostatitis es la hinchazón e irritación de la glándula prostática. Cuando es causada por una infección con bacterias, se denomina prostatitis bacteriana. Existen tres clases: la prostatitis bacteriana aguda que comienza rápidamente, la bacteriana crónica que dura 3 meses o más y la irritación continua de la próstata que no es causada por bacterias se denomina prostatitis abacteriana crónica.

¿Qué causa la prostatitis?

Cualquier bacteria que pueda causar una infección urinaria puede producir una prostatitis bacteriana aguda.

Algunas enfermedades de transmisión sexual pueden causar prostatitis bacteriana, entre ellas clamidia y  gonorrea. En hombres mayores de 35 años, la E. coli y otras bacterias comunes por lo regular causan este padecimiento. También puede presentarse después de una Epididimitis, una Uretritis o de Infecciones urinarias

Asimismo, la prostatitis aguda puede ser causada por problemas con la uretra o la próstata, tales como la Obstrucción de la salida de la vejiga, la imposibilidad de retraer el prepucio, una lesión al área entre el escroto y el ano, una biopsia de próstata (extracción de un pedazo de tejido para buscar cáncer).

Los hombres de 50 años o más que tienen agrandamiento de la próstata presentan un mayor riesgo de sufrir prostatitis. La glándula prostática puede obstruirse, lo que facilita la proliferación de las bacterias.

¿Qué síntomas se presentan?

Los síntomas en su fase aguda pueden comenzar rápidamente e incluir escalofríos, fiebre, enrojecimiento de la piel, sangre en la orina, ardor o dolor al orinar, dificultad para vaciar la vejiga, orina de olor fétido y chorro urinario débil. Es posible que se presente también dolor o malestar en el abdomen por encima del hueso púbico, en la región lumbar, en el área entre los genitales y el ano, o en los testículos, dolor o malestar con la eyaculación o sangre en el semen.

Los síntomas en su fase crónica son similares, pero no tan graves. Por lo general, comienzan más lentamente. Algunas personas no tienen síntomas entre cada episodio.

¿Qué tratamiento debo llevar en caso de tener este padecimiento?

A menudo se utilizan antibióticos para tratar las infecciones de la próstata. A veces la infección no desaparece, incluso después de tomar antibióticos por un largo tiempo. Los síntomas pueden reaparecer cuando se suspende el medicamento.

Si su glándula prostática inflamada le dificulta vaciar la vejiga, usted puede necesitar una sonda para vaciarla. Ésta se puede introducir a través del abdomen o desde el interior de su cuerpo.

Después de terminar el tratamiento antibiótico, hágase examinar por el médico para verificar que la infección haya desaparecido.

Recuerde que si presenta algún síntoma debe consultar a su médico para recibir el tratamiento adecuado.